OMA, ubicado dentro del Four Seasons Hotel en Ciudad de México, se presenta como un refugio para los amantes de la cocina japonesa, ofreciendo una experiencia omakase que trasciende lo convencional. Con solo diez asientos disponibles, este restaurante se convierte en un espacio íntimo donde cada comensal puede disfrutar de un viaje culinario guiado por el chef Abraham López, quien ha dedicado más de 17 años a perfeccionar su arte en la cocina japonesa. La filosofía detrás de OMA se centra en el respeto por los ingredientes y la tradición, lo que se refleja en cada uno de los platillos que se sirven.
La experiencia omakase, que significa «dejarse llevar por el chef», es un ritual que invita a los comensales a sumergirse en un mundo de sabores y texturas. El menú, que varía entre 12 y 21 tiempos, se compone en su mayoría de productos nacionales de alta calidad, lo que resalta la riqueza de la gastronomía mexicana en combinación con la técnica japonesa. Desde sashimis frescos hasta nigiris elaborados con maestría, cada bocado es una celebración de la cocina.
### Un Viaje Sensorial a Través de la Cocina Japonesa
El omakase en OMA comienza con un suimono, un caldo japonés claro que se sirve caliente y que puede incluir pescado o mariscos. Este primer plato establece el tono para lo que está por venir. A medida que avanza la experiencia, los comensales son sorprendidos con una variedad de ensaladas y sashimis que destacan la frescura y la calidad de los ingredientes. Por ejemplo, el chef presenta un calamar luciérnaga y un rock cod de Baja California, acompañados de una salsa de jengibre que realza los sabores.
Uno de los momentos más esperados de la cena son los nigiris, que son considerados las estrellas del omakase. El chef López aconseja comerlos con la mano, asegurándose de que el pescado toque la lengua primero para disfrutar plenamente de su sabor. Cada nigiri es una obra maestra, desde el chutoro hasta el wagyu, cada uno preparado con una atención meticulosa a los detalles. El chef también incorpora un toque mexicano en algunos platillos, como el nigiri de totoaba con chiltepín y chapulines, lo que añade una dimensión única a la experiencia sin comprometer la tradición japonesa.
### La Maestría del Chef Abraham López
El chef Abraham López es el corazón de OMA, y su pasión por la cocina japonesa es evidente en cada plato que crea. Su formación en un hotel japonés le ha proporcionado una base sólida en las técnicas tradicionales, pero su deseo de innovar y experimentar lo ha llevado a crear un menú que respeta la esencia de la cocina japonesa mientras incorpora elementos de la gastronomía mexicana. «La cocina japonesa se hace con mucho respeto, al igual que la mexicana», comenta López, enfatizando la importancia de cuidar cada aspecto del proceso culinario.
La experiencia en OMA no solo se trata de la comida; también incluye una cuidadosa selección de bebidas que complementan cada platillo. Desde tés tradicionales hasta cervezas japonesas y una variedad de sakes, cada bebida ha sido elegida para realzar la experiencia gastronómica. Además, el ambiente del restaurante, rodeado de un jardín que ofrece un respiro del bullicio de la ciudad, contribuye a la sensación de estar en un lugar especial y apartado del tiempo.
Al final de la experiencia, los comensales son obsequiados con un helado de jengibre fresco, un cierre perfecto para un viaje culinario que ha estimulado todos los sentidos. La atención al detalle y el compromiso con la calidad hacen de OMA un destino imperdible para aquellos que buscan una experiencia gastronómica única en la Ciudad de México. Con un enfoque en la frescura y la calidad de los ingredientes, el chef Abraham López ha logrado crear un espacio donde la tradición y la innovación coexisten en perfecta armonía. Así, OMA se convierte en un verdadero santuario para los amantes de la cocina japonesa, ofreciendo no solo una comida, sino una experiencia que perdura en la memoria de quienes tienen la fortuna de disfrutarla.