Durante el segundo trimestre de 2025, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que el 35.1% de la población en México se encontraba en situación de pobreza laboral. Esto representa aproximadamente 45.8 millones de personas que no cuentan con el ingreso suficiente para adquirir una canasta alimentaria básica para cada miembro de su hogar. Aunque este porcentaje se mantiene por debajo del 36.6% registrado antes de la pandemia, se observa un incremento de 1.2 puntos porcentuales en comparación con el 33.9% del primer trimestre de este año.
El aumento de la pobreza laboral es un fenómeno que afecta tanto a las áreas urbanas como rurales del país. En el ámbito rural, la pobreza laboral creció de 48.0% a 49.1%, mientras que en las ciudades aumentó de 29.7% a 30.8%. Este incremento es preocupante, ya que refleja la dificultad que enfrentan muchas familias para satisfacer sus necesidades básicas, a pesar de que el país ha experimentado una recuperación económica en otros sectores.
### Desigualdades Regionales en la Pobreza Laboral
Las disparidades en la pobreza laboral son evidentes al observar las cifras por estado. Chiapas encabeza la lista con una alarmante tasa del 62.5%, seguido de Oaxaca con 59.2% y Guerrero con 55.3%. Estas cifras indican que en estas regiones, más de la mitad de la población ocupada no puede cubrir sus necesidades alimentarias básicas. Por otro lado, las entidades con menor pobreza laboral son Baja California Sur (12.9%), Quintana Roo (18.0%) y Baja California (19.7%).
Entre los 32 estados del país, 22 reportaron un aumento en la pobreza laboral entre el primer y el segundo trimestre de 2025. Guerrero fue el estado que más incrementó su tasa, con un aumento de 4.3 puntos porcentuales. Otros estados como San Luis Potosí, Morelos y Querétaro también mostraron incrementos significativos. En contraste, algunas entidades como Chihuahua y Durango lograron disminuir sus tasas de pobreza laboral, lo que sugiere que las políticas locales pueden estar teniendo un impacto positivo en la mejora de las condiciones laborales.
### Ingresos Laborales y Formalidad
El ingreso laboral real promedio en México durante el segundo trimestre de 2025 fue de 7,596.46 pesos al mes. Sin embargo, este promedio oculta una gran disparidad entre géneros. Los hombres ocupados reportaron un ingreso mensual de 8,278.95 pesos, mientras que las mujeres solo alcanzaron 6,625.99 pesos, lo que representa una diferencia de 1,652.95 pesos a favor de los hombres. Esta brecha salarial es un reflejo de las desigualdades de género que persisten en el mercado laboral mexicano.
La situación se agrava aún más al considerar la formalidad laboral. La población ocupada en el sector formal reportó un ingreso mensual de 10,821.04 pesos, en contraste con los 5,257.55 pesos de aquellos en el sector informal. Esto significa que los trabajadores informales ganan un 51.4% menos que sus contrapartes formales, lo que pone de manifiesto la precariedad de muchas fuentes de empleo en el país.
La informalidad laboral no solo afecta los ingresos, sino que también limita el acceso a beneficios sociales y de salud, lo que perpetúa el ciclo de pobreza. La falta de regulación y protección para los trabajadores informales es un desafío que el gobierno debe abordar con urgencia para mejorar las condiciones de vida de millones de mexicanos.
### Implicaciones para el Futuro
El aumento de la pobreza laboral y la desigualdad en los ingresos son indicadores preocupantes que requieren atención inmediata. Las políticas públicas deben enfocarse en la creación de empleos formales y en la mejora de las condiciones laborales, especialmente en las regiones más afectadas por la pobreza. Además, es fundamental implementar medidas que promuevan la equidad de género en el ámbito laboral, garantizando que las mujeres tengan las mismas oportunidades y salarios que los hombres.
La situación actual plantea un reto significativo para el desarrollo económico y social de México. La pobreza laboral no solo afecta a los individuos y sus familias, sino que también tiene repercusiones en la economía en su conjunto. Un país con una alta tasa de pobreza laboral enfrenta dificultades para crecer y desarrollarse de manera sostenible. Por lo tanto, es esencial que se tomen medidas efectivas para abordar este problema y garantizar un futuro más próspero para todos los mexicanos.