El caso de Sofía Delgado, una niña que fue víctima de feminicidio en Colombia, ha dejado una profunda huella en la sociedad latinoamericana. La conmoción por su trágica desaparición y posterior hallazgo sin vida ha llevado a que se reabra el debate sobre la violencia de género y la responsabilidad de quienes rodean a los agresores. En este contexto, Evelyn Rodas, esposa del condenado Brayan Campo, ha decidido romper el silencio y compartir su perspectiva sobre los eventos que rodearon este horrendo crimen.
### La Desaparición de Sofía Delgado
El 29 de septiembre de 2024, la vida de Sofía Delgado cambió para siempre. La pequeña, que había salido de su hogar en Valle del Cauca para comprar un shampoo para su mascota, nunca regresó. Sus padres, alarmados por su ausencia, reportaron su desaparición a las autoridades. La búsqueda se intensificó rápidamente, pero fue solo 19 días después que se encontró su cuerpo en una zona rural, un hallazgo que dejó a la comunidad en estado de shock.
Brayan Campo, el hombre que atendía la veterinaria a la que Sofía había acudido, fue arrestado tras ser identificado como el principal sospechoso. Las investigaciones revelaron que había secuestrado a la niña, abusado de ella y finalmente la había asesinado de manera brutal. La justicia no tardó en actuar, y Campo fue condenado a 58 años de prisión por su crimen. Sin embargo, la figura de Evelyn Rodas, su esposa en ese momento, comenzó a ser objeto de escrutinio público. ¿Qué sabía ella? ¿Tuvo alguna participación en los hechos?
### Revelaciones de Evelyn Rodas
Después de un largo silencio, Evelyn Rodas decidió hablar en un podcast titulado «Conducta Delictiva», donde expuso su versión de los hechos. Según sus declaraciones, el día de la desaparición de Sofía, ella había intentado persuadir a su esposo para que no abriera la veterinaria, pero él desoyó su consejo y salió a trabajar como si nada. Evelyn relató que incluso le llevó una calculadora a su esposo, pero no le permitió ingresar al local. Ella permaneció afuera, sin sospechar que su vida cambiaría para siempre.
«En la tarde, lo llamé tres veces y me dijo que a la moto se le había dañado algo y que estaba tratando de arreglarlo. Nunca pensé que algo extraño estaba ocurriendo», confesó Evelyn. A pesar de que la desaparición de Sofía fue un evento alarmante, ella no notó ninguna reacción inusual en su esposo. «Siempre llegaba cansado a casa, así que pensé que era normal», añadió.
Cuando se enteró de la desaparición de Sofía, Evelyn se mostró preocupada y le preguntó a Brayan si había visto a la niña. Él, en cambio, negó haberla visto y su comportamiento no le pareció sospechoso. «Le mostré la foto de Sofía varias veces, pero él solo decía ‘¿quién es la niña?’. No mostraba ninguna reacción nerviosa», explicó. Esta falta de respuesta la llevó a cuestionar su propia percepción de la realidad y la relación que había tenido con su esposo.
Evelyn se sintió atrapada en una situación desgarradora. La revelación de que Brayan era un feminicida la dejó devastada. «Viví con un monstruo y eso me consumía. Deje de comer, no pensaba en nada, solo quería que esto terminara», expresó con profunda tristeza. A pesar de su dolor, Evelyn insistió en que no tuvo ninguna participación en el crimen y que no ayudó a su esposo en ningún momento.
### La Búsqueda de la Verdad
La situación de Evelyn Rodas ha generado un intenso debate sobre la responsabilidad de las parejas de los agresores. En su testimonio, ella enfatizó que no era cómplice de Brayan y que su vida se había convertido en un tormento tras conocer la verdad. «Nadie sabe lo que yo sentía. Sofía era una niña y yo tengo una hija. Me di cuenta de que Brayan era el monstruo que todos buscaban», afirmó.
Evelyn también reveló que tuvo la oportunidad de hablar con Brayan después de su arresto. Sin embargo, cuando le preguntó sobre el feminicidio de Sofía, él se quedó en silencio, evitando cualquier discusión sobre el tema. «Él me llamaba para hablar de cuestiones económicas, pero cuando intenté preguntarle sobre lo que había sucedido, él simplemente no respondía», relató.
La investigación sobre el caso de Sofía Delgado continúa, y Evelyn ha expresado su deseo de colaborar con las autoridades para esclarecer los hechos. «Quiero que la gente sepa que no me escondo. Estoy aquí y quiero ayudar en lo que pueda», concluyó. Su declaración ha abierto un nuevo capítulo en un caso que ha capturado la atención de la sociedad, resaltando la complejidad de las relaciones humanas y la necesidad de abordar la violencia de género desde múltiples ángulos.
El caso de Sofía Delgado no solo es un recordatorio de la brutalidad del feminicidio, sino también de las dinámicas familiares que pueden permitir que tales atrocidades ocurran. La voz de Evelyn Rodas, aunque controversial, añade una capa de complejidad a la narrativa, invitando a la reflexión sobre la responsabilidad y la complicidad en situaciones de violencia.
La historia de Sofía y las revelaciones de Evelyn continúan resonando en la sociedad, instando a un cambio en la forma en que se percibe y se aborda la violencia de género. La lucha por la justicia y la verdad sigue siendo un camino difícil, pero es uno que debe ser recorrido para honrar la memoria de las víctimas y prevenir futuros crímenes.
