La Copa del Mundo de 1986, celebrada en México, es recordada no solo por los emocionantes partidos y la consagración de Diego Armando Maradona, sino también por las anécdotas que marcaron la historia del fútbol. Una de las historias más fascinantes proviene del periodista José Ramón Fernández, quien, en un acto de audacia y pasión por el deporte, logró entrevistar al legendario futbolista argentino en un contexto muy particular.
### La Copa del Mundo de México 1986: Un Escenario de Grandes Momentos
El Mundial de 1986 fue el segundo que se llevó a cabo en México, después del exitoso torneo de 1970. En esta edición, el mundo del fútbol se centró en la figura de Maradona, quien se convirtió en el eje de atención tras su destacada actuación. Con cinco goles y cinco asistencias, el capitán argentino no solo llevó a su selección a la victoria, sino que también dejó una huella imborrable en la historia del fútbol.
Las selecciones favoritas para este torneo incluían a Italia, que defendía su título, y a Alemania Federal, subcampeona en la edición anterior. Sin embargo, fue la Argentina de Maradona la que se robó el espectáculo. La actuación del futbolista en el partido contra Inglaterra, donde anotó dos de los goles más icónicos de la historia, consolidó su estatus como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.
### La Intriga de una Entrevista a Escondidas
En medio de este ambiente de fervor futbolístico, José Ramón Fernández, un reconocido periodista deportivo, se encontró en una situación complicada. A pesar de su deseo de entrevistar a Maradona, se enfrentaba a la prohibición de ingresar a las instalaciones del Club América, donde se encontraba el equipo argentino. Su conocido antiamericanismo le había cerrado las puertas, pero su determinación por conseguir la entrevista lo llevó a buscar una solución creativa.
Fernández recordó que, tras un programa en el que se discutió la actuación de Maradona, recibió una llamada de Jorge Valdano, un compañero de equipo y amigo del futbolista. Valdano le comentó que Maradona estaba decepcionado porque no había recibido el reconocimiento que merecía por su actuación. Fue entonces cuando Fernández decidió actuar.
«Le dije a Valdano que estábamos preparando un programa especial dedicado a Maradona y que sería una gran oportunidad para que él hablara sobre su experiencia en el Mundial. Le pedí que me ayudara a conseguir acceso para entrevistar a Diego», relató Fernández. Con la ayuda de Valdano, logró que le permitieran entrar a las instalaciones del América, aunque con ciertas condiciones.
«Me dijo que podía entrar, pero tenía que hacerlo por un pasillo trasero para evitar ser visto. Así que, al día siguiente, me presenté en Coapa, nervioso pero emocionado», recordó. La entrevista fue breve, pero significativa. Maradona, en un estado de euforia tras su actuación, compartió sus pensamientos sobre el torneo y su confianza en que Argentina ganaría la Copa del Mundo.
Este encuentro no solo fue un hito en la carrera de Fernández, sino que también se convirtió en una de las anécdotas más memorables del Mundial de 1986. La pasión y la dedicación del periodista por el fútbol lo llevaron a vivir una experiencia única que quedaría grabada en la historia del deporte.
### La Legado de Maradona y el Mundial de 1986
La Copa del Mundo de 1986 no solo se recuerda por los logros de Maradona, sino también por el impacto que tuvo en la cultura futbolística mundial. La forma en que el torneo se desarrolló, las historias de los jugadores y las emociones vividas en cada partido han dejado una marca indeleble en la memoria colectiva.
Maradona, con su talento y carisma, se convirtió en un ícono no solo en Argentina, sino en todo el mundo. Su legado perdura en cada rincón del planeta donde se ama el fútbol. La anécdota de José Ramón Fernández es solo una de las muchas historias que ilustran la grandeza de este torneo y la influencia de Maradona en la historia del deporte.
La Copa del Mundo de 1986 sigue siendo un referente en la historia del fútbol, un evento que unió a millones de personas y que, a través de historias como la de Fernández y Maradona, continúa inspirando a nuevas generaciones de aficionados y jugadores. El Mundial de México 1986 es, sin duda, un capítulo inolvidable en la historia del fútbol.