El chile en nogada es uno de los platillos más emblemáticos de la gastronomía mexicana, especialmente de Puebla. Este manjar, que combina sabores dulces y salados, ha sido objeto de debate en los últimos años, especialmente en cuanto a su preparación. La controversia gira en torno a si debe ser capeado o no, una decisión que ha generado opiniones encontradas entre cocineros tradicionales y chefs contemporáneos.
### La Historia del Chile en Nogada
Originario de Puebla, el chile en nogada tiene una rica historia que se remonta a la época colonial. Se dice que fue creado por las monjas agustinas del convento de Santa Mónica en Puebla, quienes lo prepararon para celebrar la independencia de México. Originalmente, este platillo se servía como un postre, sin el capeado que hoy conocemos. Con el tiempo, su preparación ha evolucionado, y se ha convertido en un plato fuerte, especialmente durante las festividades patrias en septiembre.
Los ingredientes del chile en nogada son un reflejo de la riqueza agrícola de la región. Este platillo se elabora con chiles poblanos, picadillo de carne de res y cerdo, frutas como durazno, pera y manzana, y se adereza con una salsa de nuez de castilla. La combinación de sabores y texturas es lo que lo hace único y apreciado tanto a nivel nacional como internacional.
### La Preparación Tradicional
Reina López, una de las cocineras tradicionales de Puebla, comparte su experiencia en la elaboración de este platillo. Para ella, el secreto de un buen chile en nogada radica en el amor y la dedicación que se le pone a la cocina. «Desde niña, cuando tenía 8 años, ya en la familia se elaboraban los chiles en nogada, llevados por las abuelitas y las tías que nos enseñaban a hacerlos», comenta Reina mientras prepara los ingredientes.
La preparación del chile en nogada puede tardar entre seis y doce horas, dependiendo de la cantidad que se desee hacer. Este proceso incluye la selección de frutas frescas, la elaboración del picadillo y el capeado de los chiles. Guadalupe Ruiz, otra cocinera tradicional, enfatiza que toda la fruta utilizada es natural y fresca, lo que garantiza un sabor auténtico. «Aquí no es que la congelemos. Aquí es así como sale la fruta, así como la preparamos», afirma.
La controversia sobre si el chile debe ser capeado o no ha ganado notoriedad en los últimos años. Algunos restaurantes de lujo han optado por ofrecer versiones sin capeado, argumentando que son más saludables. Sin embargo, Reina sostiene que el capeado es esencial para disfrutar plenamente del platillo. «Anteriormente el chile no iba capeado, cuando lo hicieron las monjas era un postre. Se convierte en un plato fuerte cuando se le añade el capeado», explica.
### La Feria del Chile en Nogada
Cada año, la temporada de chiles en nogada comienza en julio y culmina en agosto con una feria en San Nicolás de los Ranchos, Puebla. Durante esta feria, los visitantes pueden disfrutar de recorridos guiados a las huertas locales, donde se cultivan los ingredientes frescos del platillo. Myrna Sánchez, presidenta del DIF municipal, destaca que la feria incluye música, bailes tradicionales y la oportunidad de degustar los frutos directamente de los árboles.
«Va a haber los carros que van a transportar a los turistas, el turibuses y otros que van a llegar también. Entonces sí va a haber», asegura Myrna, refiriéndose a la experiencia única que ofrece la feria. Los visitantes no solo podrán degustar el chile en nogada, sino también aprender sobre la historia y la cultura que rodea a este platillo.
La feria se ha convertido en un evento importante para la comunidad, promoviendo la gastronomía local y atrayendo a turistas de diferentes partes del país. La experiencia de participar en esta celebración va más allá de simplemente comer; es una inmersión en la cultura poblana y sus tradiciones culinarias.
### La Preferencia del Consumidor
La pregunta que muchos se hacen es: ¿capeado o sin capear? La respuesta varía según las preferencias personales. Mientras que algunos defienden la tradición del capeado, otros optan por la versión más ligera. Este debate refleja no solo una diferencia en gustos, sino también una evolución en la forma en que se percibe la cocina mexicana.
El chile en nogada, con su rica historia y su compleja preparación, sigue siendo un símbolo de la identidad poblana. Ya sea que se prefiera capeado o sin capeado, lo que realmente importa es el amor y la dedicación que se pone en cada plato. La cocina es un arte que se transmite de generación en generación, y el chile en nogada es un claro ejemplo de cómo la tradición puede coexistir con la modernidad en la gastronomía.