El telescopio espacial Hubble ha capturado imágenes impresionantes del cometa interestelar 3I/Atlas, un fenómeno astronómico que ha fascinado a científicos y entusiastas del espacio. Este cometa, que fue descubierto por primera vez el 1 de julio de 2025, se ha convertido en el tercer visitante interestelar observado por la humanidad, después de 1I/ʻOumuamua en 2017 y 2I/Borisov en 2019. La imagen más nítida del cometa fue obtenida el 21 de julio, cuando se encontraba a 365 millones de kilómetros de la Tierra, y ha sido divulgada recientemente por la NASA.
La importancia de este descubrimiento radica no solo en la belleza de las imágenes, sino también en la información científica que proporciona. El Hubble ha detectado una columna de polvo que se expulsa del lado del cometa que está siendo calentado por el Sol, así como una cola de polvo que se aleja del núcleo del cometa. Estos datos sugieren que 3I/Atlas está perdiendo polvo de una manera similar a los cometas que se originan en nuestro sistema solar, aunque este en particular proviene de un lugar fuera de la Vía Láctea.
### Características del Cometa 3I/Atlas
El cometa 3I/Atlas se mueve a una velocidad impresionante de aproximadamente 210,000 kilómetros por hora, lo que lo convierte en el visitante más rápido registrado en nuestro sistema solar. Esta velocidad sugiere que ha estado viajando por el espacio interestelar durante miles de millones de años. Las observaciones realizadas por el Hubble han permitido a los astrónomos estimar el tamaño del núcleo helado del cometa, que podría tener un diámetro de entre 320 metros y 5.6 kilómetros.
Según el astrónomo Matthew Hopkins de la Universidad de Oxford, 3I/Atlas podría ser el cometa más antiguo jamás observado, con una edad estimada de más de 7,000 millones de años, lo que significa que es anterior al sistema solar en aproximadamente 3,000 millones de años. Este dato es fascinante, ya que ofrece una ventana al pasado del universo y a la formación de los cuerpos celestes.
El cometa fue avistado inicialmente por el telescopio de la red de detección y alerta temprana de asteroides (ATLAS) en Río Hurtado, Chile, cuando se encontraba a 675 millones de kilómetros del Sol. Desde su descubrimiento, ha capturado la atención de la comunidad científica y del público en general, que sigue con interés su trayectoria a través del sistema solar.
### Observaciones Futuras y Relevancia Científica
Las observaciones del cometa 3I/Atlas continuarán hasta septiembre, cuando se acercará demasiado al Sol para ser observado con telescopios terrestres. Sin embargo, se espera que el cometa reaparezca al otro lado del Sol a principios de diciembre, lo que permitirá a los astrónomos seguir estudiando su comportamiento y características.
La relevancia de este cometa va más allá de su velocidad y antigüedad. La información que se obtiene de su estudio puede ofrecer pistas sobre la composición de los cometas y su formación, así como sobre las condiciones en el espacio interestelar. Esto es crucial para entender mejor la historia del sistema solar y la evolución de los cuerpos celestes que lo habitan.
El Hubble, que ha estado en funcionamiento durante más de 30 años, sigue siendo una herramienta invaluable para la astronomía moderna. Su capacidad para capturar imágenes de alta resolución y su tecnología avanzada permiten a los científicos realizar descubrimientos que antes eran inimaginables. La misión del Hubble ha sido fundamental para ampliar nuestro conocimiento del universo y para inspirar a nuevas generaciones de astrónomos y científicos.
El cometa 3I/Atlas es un recordatorio de que el universo está lleno de misterios y maravillas, y que cada nuevo descubrimiento nos acerca un paso más a comprender nuestro lugar en el cosmos. Con cada imagen y cada dato recolectado, los científicos continúan desentrañando los secretos del espacio, y el Hubble sigue siendo un faro de conocimiento en esta búsqueda interminable.