La situación económica de México se encuentra en un punto crítico, con proyecciones que indican que el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum heredará a las futuras generaciones una deuda adicional de 9.1 billones de pesos. Este incremento en la deuda pública ha sido objeto de análisis y debate, especialmente en el contexto de las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) que anticipan un aumento significativo en los compromisos financieros del país durante este sexenio.
### Proyecciones de Deuda y su Impacto en la Economía
De acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la deuda pública alcanzará un total de 28.2 billones de pesos para el año 2030. Este monto representa un aumento considerable en comparación con los 19.1 billones de pesos registrados al cierre del año anterior. La deuda bruta se proyecta que equivaldrá al 57.4% del Producto Interno Bruto (PIB) al finalizar la gestión actual, marcando la tasa más alta desde 1988. Este panorama plantea serias preocupaciones sobre la sostenibilidad fiscal del país y su capacidad para cumplir con las necesidades básicas de la población, como educación, salud y seguridad.
Los analistas económicos advierten que el incremento en la deuda pública podría resultar en mayores impuestos para las futuras generaciones, así como en una reducción del gasto público. Clemente Ruiz Durán, profesor e investigador del Posgrado de Economía de la UNAM, señala que el gobierno ha optado por la contratación de deuda como una solución fácil ante un gasto que supera los ingresos. Esta situación exige una reforma fiscal integral que permita al Estado contar con los recursos necesarios para cumplir con sus funciones esenciales.
### Necesidad de una Reforma Fiscal Integral
La propuesta de una reforma fiscal integral se vuelve urgente en este contexto. Ruiz Durán sugiere que se convoque a un Congreso Fiscal en 2026 para revisar la estructura de los ingresos públicos con una perspectiva a largo plazo. Desde la administración anterior, se ha evitado reconocer la necesidad de aumentar la base impositiva, lo que ha llevado a una situación en la que las necesidades básicas de la población han quedado desatendidas.
Los expertos de Banamex, Iván Arias y Arely Medina, también enfatizan la importancia de evaluar una reforma fiscal que no solo fortalezca los ingresos federales, sino que también aborde los ingresos locales. La meta debe ser acercar a México a las tasas de recaudación de países con economías similares, lo que permitiría un manejo más eficiente de los recursos y una mejor atención a los rezagos en infraestructura, educación y salud.
La SHCP ha argumentado que el ajuste de la deuda en función del tamaño de la economía es fundamental, ya que un mayor PIB implica una mayor capacidad para absorber pasivos. Sin embargo, los analistas advierten que si la economía no crece al ritmo esperado, se enfrentarán a recortes en el gasto y a una disminución de los ingresos, lo que podría agravar aún más la situación financiera del país.
### Perspectivas Futuras y Desafíos
Las proyecciones indican que la deuda bruta podría alcanzar el 60% del PIB hacia 2028, lo que plantea un desafío significativo para la administración actual. La SHCP estima un crecimiento anual promedio del PIB de 1.9% entre 2025 y 2030, un ritmo que, de confirmarse, resultaría en el segundo peor desempeño económico en términos de crecimiento desde la administración de Miguel de la Madrid.
Mariana Campos, directora del centro México Evalúa, advierte que si la economía no se recupera como se espera, habrá menos ingresos y recortes al gasto, lo que afectará directamente a la población. La regla de oro de las finanzas, que establece que toda la deuda debe utilizarse para fines productivos, se ha visto comprometida en esta administración, lo que podría tener repercusiones a largo plazo.
El aumento de 9.1 billones de pesos en la deuda pública también implica que México podría escalar posiciones en el ranking internacional de deuda bruta gubernamental en relación con el PIB, desplazando a países como Argentina y Colombia. Esta situación no solo afecta la imagen del país en el ámbito internacional, sino que también plantea interrogantes sobre la capacidad del gobierno para gestionar sus finanzas de manera responsable.
En resumen, el aumento de la deuda pública en México es un tema que requiere atención urgente. Las proyecciones indican un futuro complicado si no se implementan reformas fiscales efectivas y se toman decisiones estratégicas para asegurar la sostenibilidad económica del país. La situación actual no solo impacta a la administración presente, sino que también define el legado que se dejará a las futuras generaciones.