El 19 de mayo es una fecha significativa en el calendario católico, ya que se conmemoran varios santos, siendo San Pedro Celestino V uno de los más destacados. Esta efeméride es celebrada en diversas partes del mundo, y es un momento para recordar las vidas y enseñanzas de aquellos que han dejado una huella en la historia de la Iglesia. En este artículo, exploraremos la vida de San Pedro Celestino V, así como otros santos que también son recordados en esta fecha.
San Pedro Celestino V: Un Papa Humilde y Valiente
San Pedro Celestino V, conocido originalmente como Pietro Angelerio, nació en 1215 en Isernia, Italia. Desde joven, mostró una profunda inclinación hacia la vida religiosa, lo que lo llevó a convertirse en monje benedictino y, posteriormente, en ermitaño. Su vida estuvo marcada por la búsqueda de la soledad y la oración, y se hizo famoso por su piedad, ayunos y visiones místicas. En las montañas del monte Morrone, fundó una orden monástica que más tarde sería conocida como los Celestinos, una rama de los benedictinos.
La historia de su papado es notable y poco convencional. En 1294, tras un prolongado cónclave que duró más de dos años, Pietro Angelerio fue elegido Papa a la edad de casi 80 años. A pesar de no haber buscado nunca el cargo, aceptó la responsabilidad con la creencia de que era la voluntad de Dios. Adoptó el nombre de Celestino V, pero su pontificado fue breve, durando solo cinco meses. La complejidad política de la curia romana lo abrumó, y sintiéndose incapaz de gobernar adecuadamente, decidió renunciar el 13 de diciembre de 1294. Esta decisión lo convirtió en uno de los pocos papas en la historia que ha renunciado voluntariamente.
Después de su renuncia, su sucesor, Bonifacio VIII, lo mantuvo recluido por temor a que pudiera convertirse en un símbolo de oposición. San Pedro Celestino V murió en prisión en 1296, y su fama de santidad creció tras su fallecimiento. Fue canonizado en 1313 por el Papa Clemente V. Su vida es un testimonio de humildad y valentía, mostrando que incluso en los altos cargos, la renuncia puede ser un acto de gran valor espiritual.
La Basílica de Santa Maria di Collemaggio: Un Lugar de Peregrinación
San Pedro Celestino V tiene varias iglesias dedicadas a su memoria, siendo la más importante la Basílica de Santa Maria di Collemaggio, ubicada en L’Aquila, en su Italia natal. Esta basílica es significativa porque fue el lugar donde fue coronado Papa en 1294 y donde también fue enterrado. Con el tiempo, su tumba se convirtió en un sitio de peregrinación para los fieles. A pesar de haber sido gravemente dañada por un terremoto en 2009, la basílica ha sido restaurada y sigue siendo un importante centro de devoción.
Además de la Basílica de Santa Maria di Collemaggio, existen otras iglesias y capillas menores en Italia que llevan su nombre o contienen reliquias suyas, especialmente en las regiones de Abruzos y Molise, donde vivió como ermitaño. La devoción hacia San Pedro Celestino V continúa viva, y su legado espiritual sigue inspirando a muchos.
Otros Santos Celebrados el 19 de Mayo
Aunque San Pedro Celestino V es el santo más destacado del 19 de mayo, no es el único que se recuerda en esta fecha. La lista de santos conmemorados incluye a figuras como Adolfo de Arras, Alcuino, Crispín de Viterbo, Dunstán, Francisco Coll, Teófilo de Corte y Urbano I, papa. Cada uno de estos santos tiene su propia historia y contribuciones a la fe católica, y su celebración en este día es una oportunidad para que los fieles reflexionen sobre sus vidas y enseñanzas.
Adolfo de Arras, por ejemplo, es conocido por su dedicación a la educación y su labor pastoral. Alcuino fue un destacado teólogo y educador que desempeñó un papel crucial en la revitalización de la educación en la Europa medieval. Crispín de Viterbo, por su parte, es recordado por su vida de austeridad y su compromiso con la enseñanza de la fe. Dunstán, un importante abad y arzobispo, es conocido por su labor en la reforma de la Iglesia en Inglaterra. Francisco Coll fue un sacerdote español que fundó la Congregación de los Sagrados Corazones, mientras que Teófilo de Corte es venerado por su vida de oración y servicio. Urbano I, otro papa, es recordado por su papel en la expansión de la fe cristiana.
La conmemoración de estos santos el 19 de mayo no solo resalta la diversidad de la historia de la Iglesia, sino que también invita a los fieles a seguir su ejemplo de vida y dedicación a la fe. Cada uno de ellos, al igual que San Pedro Celestino V, ofrece un modelo de virtudes que pueden inspirar a las generaciones actuales a vivir con propósito y compromiso espiritual.