La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha emitido una alerta importante para los usuarios de gimnasios Energy Fitness, una cadena que ha estado en el centro de controversias debido a su cierre repentino de sucursales y la venta de anualidades a pesar de estas clausuras. Desde 2024, la Oficina de Defensa del Consumidor Zona Leona Vicario ha recibido un total de 166 quejas relacionadas con esta situación, lo que ha llevado a la Profeco a tomar medidas para proteger a los consumidores afectados.
**Cierre de Sucursales y Quejas de Consumidores**
La situación ha generado preocupación entre los usuarios de Energy Fitness, quienes han reportado que, tras el cierre de una sucursal, se les indicaba que podían acudir a otra para seguir utilizando los servicios. Sin embargo, muchos de estos usuarios habían pagado por anualidades que ahora se ven en riesgo debido a la falta de acceso a las instalaciones. La Profeco ha señalado que este comportamiento es inaceptable y ha instado a los consumidores a estar alerta antes de contratar servicios con esta cadena de gimnasios.
Las quejas recibidas por la Profeco reflejan un patrón preocupante: muchos consumidores se sienten engañados al haber pagado por un servicio que no pueden utilizar. La mayoría de las quejas provienen de personas que ya habían realizado el pago de su anualidad y que, al intentar acceder a su gimnasio habitual, se encontraron con que estaba cerrado. Esta situación ha llevado a la Profeco a ofrecer asesoría a aquellos que se sientan afectados por el cierre de las sucursales y la falta de cumplimiento por parte de Energy Fitness.
La Profeco ha recordado a los consumidores que es fundamental estar informados sobre los derechos que tienen al contratar servicios de este tipo. En caso de que se presenten problemas, los usuarios pueden formalizar sus quejas a través de diversos canales de comunicación, incluyendo el Teléfono del Consumidor y las redes sociales de la Profeco. Esta medida busca garantizar que los consumidores puedan hacer valer sus derechos y recibir la atención necesaria ante situaciones de incumplimiento por parte de proveedores de servicios.
**Recomendaciones para Consumidores**
Ante esta problemática, la Profeco ha emitido varias recomendaciones para los consumidores que están considerando contratar servicios en gimnasios, especialmente en Energy Fitness. Primero, se aconseja investigar la reputación del gimnasio y leer reseñas de otros usuarios antes de realizar cualquier pago. Las redes sociales y plataformas de reseñas pueden ser herramientas útiles para conocer la experiencia de otros consumidores.
Además, es recomendable solicitar información clara sobre las políticas de cancelación y reembolso antes de adquirir una anualidad. Los consumidores deben asegurarse de entender las condiciones bajo las cuales pueden recuperar su dinero en caso de que el gimnasio cierre o no cumpla con los servicios prometidos. La transparencia en estos aspectos es crucial para evitar sorpresas desagradables en el futuro.
La Profeco también ha enfatizado la importancia de conservar todos los recibos y comprobantes de pago, ya que estos documentos son esenciales para presentar una queja formal en caso de que surjan problemas. Tener un registro claro de las transacciones realizadas puede facilitar el proceso de reclamación y aumentar las posibilidades de obtener una solución favorable.
Por último, la Profeco ha instado a los consumidores a no dudar en presentar quejas si consideran que han sido víctimas de prácticas engañosas. La institución está comprometida a proteger los derechos de los consumidores y a tomar medidas contra aquellos proveedores que no cumplan con sus obligaciones.
La situación con Energy Fitness es un recordatorio de la importancia de estar informados y ser cautelosos al contratar servicios, especialmente en un sector tan competitivo como el de los gimnasios. Los consumidores deben empoderarse y conocer sus derechos para evitar ser víctimas de situaciones similares en el futuro. La Profeco continúa trabajando para garantizar que los derechos de los consumidores sean respetados y que se tomen medidas adecuadas ante cualquier irregularidad en el mercado.