La reciente elección de Robert Francis Prevost como el nuevo Papa, bajo el nombre de León XIV, ha capturado la atención del mundo no solo por su cargo, sino también por su emotivo discurso inaugural en español. Este gesto ha suscitado preguntas sobre su conexión con América Latina y la importancia del idioma en su mensaje. En este artículo, exploraremos las razones detrás de su elección de hablar en español y su relevancia en el contexto actual de la Iglesia Católica.
La elección de Prevost como Papa marca un hito significativo en la historia de la Iglesia. Nacido en Chicago, Prevost ha dedicado gran parte de su vida al servicio pastoral en Perú, donde ha desarrollado una profunda conexión con la cultura y la comunidad hispanohablante. Su fluidez en español, adquirida a lo largo de casi cuatro décadas de trabajo misionero, le permite comunicarse de manera efectiva con una gran parte de la población católica mundial, que se encuentra en su mayoría en América Latina.
### Un Mensaje de Inclusión y Cercanía
Durante su primer discurso desde el balcón de la basílica de San Pedro, el Papa León XIV sorprendió a muchos al dirigirse a los fieles en español. En su mensaje, destacó la importancia de la comunidad y la fe, expresando su deseo de ser una Iglesia que camina junto a los que sufren. Al decir: “Si se me permite también, unas palabras, un saludo para todos aquellos, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo”, Prevost no solo se dirigió a los hispanohablantes, sino que también envió un mensaje de inclusión a todos los católicos del mundo.
Este enfoque en el español no es casualidad. La Iglesia Católica ha visto un crecimiento significativo en su base de fieles en América Latina, donde el español es el idioma predominante. Al hablar en este idioma, Prevost reconoce la importancia de esta región y su papel fundamental en la Iglesia. Además, su uso del español se alinea con el legado de su predecesor, el Papa Francisco, quien también priorizó el idioma como un medio para conectar con los fieles, especialmente en su tierra natal, Argentina.
La decisión de Prevost de hablar en español también refleja su compromiso con una Iglesia más sinodal, es decir, una Iglesia que escucha y camina junto a su pueblo. Este enfoque es esencial en un momento en que la Iglesia enfrenta desafíos significativos, incluyendo divisiones internas y la necesidad de acercarse a las periferias sociales y espirituales.
### La Trayectoria de Prevost en América Latina
Robert Prevost no es un extraño en América Latina. Su trayectoria comenzó en 1985, cuando llegó a Perú como misionero agustiniano. Desde entonces, ha trabajado en diversas comunidades, incluyendo Chulucanas y Trujillo, donde se dedicó a la labor pastoral y al servicio de los más necesitados. Su experiencia en el país sudamericano le ha proporcionado una comprensión profunda de los desafíos y las realidades que enfrentan muchas comunidades católicas en la región.
En 2015, Prevost fue nombrado obispo de Chiclayo, donde continuó su labor de servicio y compromiso con la comunidad. Durante su tiempo en Perú, adquirió la nacionalidad peruana, convirtiéndose en el primer Papa con una identidad dual estadounidense-latinoamericana. Esta conexión le otorga una perspectiva única y valiosa en su papel como líder de la Iglesia Católica.
La elección de Prevost como León XIV también es significativa en el contexto de la política global. Históricamente, la Iglesia ha evitado elegir pontífices de superpotencias como Estados Unidos, lo que hace que su elección sea un punto de inflexión. Prevost es visto como un “constructor de puentes” en una Iglesia que a menudo se encuentra dividida entre sectores progresistas y conservadores. Su experiencia en América Latina y su enfoque pastoral lo posicionan como un líder capaz de mediar y unir diferentes corrientes dentro de la Iglesia.
El uso del español en su discurso inaugural no solo es un gesto simbólico, sino que también refuerza su compromiso con una Iglesia global que busca estar cerca de las periferias y de aquellos que sufren. Al igual que su predecesor, el Papa Francisco, Prevost parece estar dispuesto a continuar promoviendo los ideales de servicio a los pobres y marginados, así como a fomentar un diálogo inclusivo dentro de la Iglesia.
La elección de León XIV y su mensaje en español son un recordatorio de la importancia de la diversidad cultural y lingüística en la Iglesia Católica. A medida que el mundo enfrenta desafíos cada vez más complejos, la capacidad de Prevost para comunicarse y conectar con diferentes comunidades será crucial para su liderazgo y para el futuro de la Iglesia.