La percepción de inseguridad en México ha alcanzado niveles alarmantes, según los últimos datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). En septiembre de 2025, un 63% de la población adulta de 18 años y más, que reside en las principales localidades del país, consideró que vivir en su ciudad es inseguro. Este porcentaje representa un aumento significativo en comparación con el 58.6% reportado en el mismo mes del año anterior, aunque no muestra un cambio notable respecto al 63.2% de junio de 2025, que fue el nivel más alto desde diciembre de 2022.
La percepción de inseguridad varía notablemente entre géneros. Las mujeres reportan una tasa de percepción de inseguridad del 68.2%, en contraste con el 56.7% de los hombres. Este dato resalta la diferencia en la experiencia de seguridad entre los géneros, lo que puede estar influenciado por diversos factores sociales y culturales que afectan la forma en que hombres y mujeres perciben su entorno.
### Análisis por Localidades: Las Más y Menos Inseguras
El análisis de las 91 localidades evaluadas por el INEGI revela que 33 áreas urbanas presentaron cambios estadísticamente significativos en la percepción de inseguridad. De estas, 29 mostraron un aumento en la percepción de inseguridad, mientras que solo 4 reportaron una disminución. Las localidades con mayor porcentaje de personas que consideran que vivir en su ciudad es inseguro son Culiacán (88.3%), Irapuato (88.2%), Chilpancingo (86.3%), Ecatepec (84.4%) y Cuernavaca (84.2%). Estos datos indican que la inseguridad es un problema crítico en estas áreas, donde la población siente una amenaza constante a su seguridad personal.
Por otro lado, las localidades con menor percepción de inseguridad incluyen San Pedro Garza García (8.9%), Piedras Negras (15.0%), Benito Juárez (15.6%), Los Mochis (19.2%) y San Nicolás de los Garza (22.4%). Este contraste sugiere que existen factores locales que pueden influir en la percepción de seguridad, como la presencia de fuerzas de seguridad, políticas públicas efectivas y la cohesión social.
### Expectativas Futuras sobre la Inseguridad
En cuanto a las expectativas sobre la situación de la delincuencia e inseguridad en los próximos 12 meses, el 34% de la población encuestada considera que la situación seguirá igual de mal, mientras que un 23.9% cree que empeorará. Solo un 16.3% de los encuestados piensa que la situación mejorará, lo que refleja un pesimismo generalizado sobre la capacidad de las autoridades para abordar el problema de la inseguridad.
Este pesimismo puede estar relacionado con la percepción de ineficacia de las políticas de seguridad implementadas hasta ahora. La falta de confianza en las instituciones encargadas de garantizar la seguridad pública puede llevar a un ciclo de desconfianza y miedo que afecta la calidad de vida de los ciudadanos.
La inseguridad no solo impacta la vida diaria de los ciudadanos, sino que también tiene repercusiones económicas. Las áreas con alta percepción de inseguridad pueden ver afectadas sus actividades comerciales, ya que los consumidores pueden optar por no salir o evitar ciertas áreas, lo que a su vez puede afectar el desarrollo económico local. Además, la inversión en estas áreas puede disminuir, ya que los inversores suelen ser cautelosos ante entornos percibidos como peligrosos.
### Factores que Contribuyen a la Inseguridad
Varios factores contribuyen a la percepción de inseguridad en México. Entre ellos se encuentran la violencia relacionada con el narcotráfico, la corrupción en las instituciones de seguridad y justicia, y la falta de oportunidades económicas. La violencia generada por los cárteles de la droga ha llevado a un aumento en los homicidios y otros delitos violentos, lo que a su vez alimenta la percepción de inseguridad entre la población.
La corrupción también juega un papel crucial en este fenómeno. Cuando los ciudadanos sienten que las autoridades no actúan de manera justa o que están involucradas en actividades ilícitas, su confianza en el sistema de justicia se erosiona. Esto puede llevar a una mayor sensación de vulnerabilidad y desamparo, lo que a su vez incrementa la percepción de inseguridad.
Finalmente, la falta de oportunidades económicas puede contribuir a la inseguridad. En áreas donde el desempleo es alto y las oportunidades de desarrollo son escasas, las personas pueden verse impulsadas a participar en actividades delictivas como una forma de subsistencia. Esto crea un ciclo vicioso donde la falta de oportunidades alimenta la inseguridad, y la inseguridad, a su vez, dificulta el desarrollo económico.
### Estrategias para Mejorar la Seguridad
Para abordar la creciente percepción de inseguridad, es fundamental implementar estrategias efectivas que aborden tanto los síntomas como las causas subyacentes del problema. Esto incluye fortalecer las instituciones de seguridad y justicia, promover la transparencia y la rendición de cuentas, y fomentar el desarrollo económico en las comunidades más afectadas.
La colaboración entre diferentes niveles de gobierno, así como con la sociedad civil, es esencial para crear un enfoque integral que aborde la inseguridad de manera efectiva. Esto puede incluir programas de prevención del delito, iniciativas de desarrollo comunitario y políticas que promuevan la inclusión social y económica.
Además, es crucial que las autoridades trabajen en la construcción de confianza con la ciudadanía. Esto puede lograrse a través de la comunicación abierta y transparente sobre las acciones que se están tomando para mejorar la seguridad, así como la participación activa de la comunidad en la formulación de políticas de seguridad.
La percepción de inseguridad en México es un problema complejo que requiere un enfoque multifacético. A medida que la población continúa enfrentando desafíos en su entorno, es vital que se tomen medidas concretas para abordar las causas y consecuencias de la inseguridad, garantizando así un futuro más seguro para todos los ciudadanos.
