El jitomate mexicano se encuentra en una encrucijada crítica, ya que el Departamento de Comercio de Estados Unidos está a punto de tomar una decisión que podría afectar drásticamente su exportación. Este producto, que ocupa un lugar destacado en la economía agrícola de México, enfrenta la posibilidad de una cuota compensatoria del 17% o una postergación de esta medida. En 2024, México exportó un total de un millón 870 mil toneladas métricas de jitomate, generando ingresos por 2.37 millones de dólares, lo que resalta la importancia de este cultivo en el comercio internacional.
La situación actual se deriva de la decisión de la Casa Blanca de poner fin al Acuerdo de Suspensión que había estado vigente desde 2019. Este acuerdo permitía la exportación de jitomate mexicano a Estados Unidos sin la imposición de cuotas compensatorias, siempre y cuando se cumplieran ciertas condiciones. Sin embargo, la presión ejercida por los productores de jitomate de Florida llevó al gobierno estadounidense a revaluar este acuerdo, lo que ha generado incertidumbre entre los productores mexicanos.
### Impacto Económico en la Producción de Jitomate
El jitomate es uno de los productos agrícolas más importantes de México, ocupando el octavo lugar a nivel mundial en producción. Las exportaciones de jitomate se encuentran entre los cinco principales agroproductos que México envía al extranjero. La región de Sinaloa es la más afectada por esta situación, ya que es el estado que más jitomate exporta a Estados Unidos. Según Juan Carlos Anaya, director general de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), la imposición de una cuota compensatoria podría poner en riesgo más de 50 mil empleos en Sinaloa.
El impacto económico de esta situación es significativo. En el primer trimestre de 2025, el precio promedio de exportación del jitomate fue de 1.17 dólares por kilo, lo que representa una disminución del 6% en comparación con el mismo período del año anterior. Esta caída en los precios se debe en parte a la competencia de productos similares provenientes de Florida y California. La imposición de un arancel podría reducir el volumen de exportación en un 25%, lo que a su vez podría provocar una caída abrupta en los precios de campo y amenazar más de 100 mil empleos directos e indirectos en México.
Además, la situación se complica aún más por el hecho de que el 99% de las exportaciones de jitomate mexicano se dirigen al mercado estadounidense. Esto significa que cualquier cambio en las políticas comerciales de Estados Unidos tiene un impacto inmediato y profundo en la economía agrícola mexicana. La posibilidad de que se imponga un arancel del 20.91% inicialmente, que podría reducirse al 17%, plantea serias preocupaciones sobre la viabilidad de las exportaciones de jitomate en el futuro cercano.
### Estrategias para Mitigar el Impacto
Ante esta situación, los productores mexicanos están buscando estrategias para mitigar el impacto de las posibles cuotas compensatorias. Una de las opciones que se están considerando es la negociación de condiciones preferenciales que permitan mantener un flujo de exportaciones más estable. Sin embargo, esto no eliminaría por completo el riesgo de un aumento en los costos logísticos y operativos, lo que podría afectar la rentabilidad de los productores.
La necesidad de diversificar los mercados de exportación también se ha vuelto evidente. Si bien Estados Unidos es el principal destino del jitomate mexicano, explorar otros mercados podría ayudar a reducir la dependencia de un solo país y disminuir el riesgo asociado con cambios en las políticas comerciales. Además, mejorar la calidad y la competitividad del jitomate mexicano en el mercado internacional podría ser clave para mantener su posición en el mercado global.
El gobierno mexicano, por su parte, está trabajando para encontrar soluciones que minimicen los efectos negativos de estas decisiones comerciales. La búsqueda de acuerdos que beneficien a ambas partes es esencial para asegurar que los productores mexicanos puedan continuar exportando su producto sin enfrentar barreras comerciales excesivas.
En resumen, el jitomate mexicano se enfrenta a un futuro incierto debido a las decisiones comerciales de Estados Unidos. La posibilidad de cuotas compensatorias plantea desafíos significativos para los productores, pero también abre la puerta a la innovación y la diversificación en el mercado. La respuesta a esta crisis podría definir el futuro del jitomate en el comercio internacional y su papel en la economía agrícola de México.